martes, 20 de octubre de 2009

Han robado, han mentido, han saqueado..., y ahora nos informan que seguirán haciéndolo


Antonio Berni, Manifestación

Ayer en el así llamado "aeropuerto" de la Facultad de Filosofía y Letras en un ingenioso periódico mural los estudiantes organizados en colectivos entre otras cosas reprodujeron un tremendo poema del poeta Manuel José Arce. Resulta tan imposible no sentirse abrumado por lo que sucede y sucederá en nuestro país, que las simples palabras de indignación se tornan ridículas y una requiere de palabras que nos hablen de las verdades piedra del pozo estómago.

Aquí reproduzco el poema (bajado de patriagrande.net) con otro, otro que es un llanto; y arriba la imagen aplastante de esta pintura de Berni.

General

General
—no importa cuál,
da lo mismo,
es igual—:
Para ser General,
como usted, General,
se necesita
haber sido nombrado General.
Y para ser nombrado General,
como usted, General,
se necesita
lo que usted no le falta, General.
Usted merece bien ser General,
llena los requisitos, General.
Ha bombardeado aldeas miserables,
ha torturado niños
ha cortado los pechos de las madres
rebosantes de leche,
ha arrancado los testículos y lenguas,
uñas y labios y ojos y alaridos.
Ha vendido mi patria
y el sudor de mi pueblo
y la sangre de todos.
Ha robado, ha mentido, ha saqueado,
ha vivido
así, de esta manera, General.

General
—no importa cuál—:
para ser General,
como usted, General,
hay una condición fundamental:
ser un hijo de puta,
General.


Equis-equis

—No, no es él.
—Sí, sí es él.
—No, no es él. No es posible que esto pueda ser él.
—Mira la cicatriz de la vacuna.
—No, no es él.
—Mira la corona de la muela que le puso Miguel
hace seis meses.
—No, no es él.
—Yo pienso que sí es él. Que esta vez si es él.
—No, no es él.
Como podría ser él si no tiene ojos.
Como podría ser él si no tiene sus manos laboriosas.
Como podría ser él si le han cortado sus semillas de hombre.
Como podría ser él sin su guitarra ni su canción,
sin aquel ceño duro ante el peligro, sin aquella sonrisa en el
trabajo.
sin su voz pronunciando el pensamiento, sin su tonta manía
de regalarme flores.
Como podría ser él.
No es él. Te digo que no es él.
No quiero que sea él.

Manuel José Arce, poeta y dramaturgo guatemalteco (1935-1985) http://www.patriagrande.net/


1 comentario:

Amit dijo...

Bien. Ese poema yo lo conocí, creo, el año pasado gracias a Moisés. Si no recuerdo mal, Moisés tuvo que leer el poemario completo que precisamente tiene ese poema para una clase Iberoamericana. Es una lástima que este poeta no sea tan conocido y tan dicícil de conseguir, el poemario se lo facilito Rosado al grupo, es una edición muy sencilla, sobria, pero sobre todo el contenido es abrumador si se compara con nuestra realidad.